Los tiempos que corren, inmersos como estamos en la llamada era de la información, han creado las condiciones propicias para una producción perenne de miles de millones de datos que viajan cada segundo alrededor del globo todos los días. La cobertura de internet y el alcance de las redes sociales expone a la sociedad a una cantidad tan grande de información, muchas veces contradictoria, que constantemente surge una pregunta entre la ciudadanía: ¿qué es verdad y qué no lo es?

Por ello, resulta vital atender a una de las voces más trascendentes e innovadoras del periodismo contemporáneo y su constante lucha contra la desinformación. En ese sentido, la iniciativa Verificado se ha convertido en un bastión de la verdad que busca brindar a través de una metodología sólida y el fact-checking la mayor cantidad de certeza posible a una sociedad que regularmente está a expensas de lo que difunden las autoridades, los grandes medios de comunicación y los galimatías que entre todas y todos generamos en las redes sociales.

A continuación, presentamos una entrevista con Daniela Mendoza, directora general de Verificado, quien lidera a un equipo que nació con cuatro auténticas “cazadoras de mentiras” y que hoy ha tomado un lugar relevante en el panorama de los medios de comunicación independientes.

P: ¿Te gustaría presentarte con un breve resumen de tu trayectoria en los medios de comunicación y el área del periodismo en la que te desempeñas?

R: Soy la autora intelectual y directora general de Verificado. Una periodista feminista con más de 20 años de trayectoria en diversos medios de comunicación. He laborado en medios como El Porvernir, Hora Cero y Milenio. También me he desempañado como maestra de periodismo en la Universidad Autónoma de Nuevo León, donde busco siempre impulsar en las y los estudiantes el amor por el fact-checking. Además, soy conferencista y capacitadora en temas relacionados con el periodismo y los derechos humanos.

P: ¿Qué te motiva a dedicarte al periodismo?

R: Para mí el periodismo es la herramienta que nos permite dar a la ciudadanía la información que necesitan para ser libres y capaces de autogobernarse. Me motiva contribuir al conocimiento colectivo de la realidad y con ello permitir que distintas culturas y puntos de vista se puedan socializar para que una comunidad se entienda mejor y se respete.

P: Lamentablemente, en México hemos dado cuenta numerosas veces de hechos terribles que han golpeado al periodismo con diferentes tipos de violencia. ¿De acuerdo con tu experiencia, en México se ejerce el periodismo en libertad?

R: El periodismo en México se ejerce con libertad, sí, pero las consecuencias son grandes; a veces las consecuencia impactan en la integridad física, y otras veces es en la falta de oportunidades, pero siempre se puede hacer un periodismo libre. Se hace en un escenario de inseguridad, censura y constante cuestionamiento desde el poder público. En México se hace buen periodismo, pero no llega a todas las personas porque las grandes empresas, las que tienen el poder de llegar a más personas, se preocupan más por aumentar su alcance que por hacer un trabajo de calidad que permita acceder a la mejor información para tomar decisiones.

P: Se ha mencionado en diversos foros que en la actualidad se vive un momento difícil para el periodismo de investigación y que ahora predomina el periodismo fast food, desarrollado con muy poca calidad y para el consumo inmediato, ¿qué piensas al respecto?

R: Pienso que ante el colapso del sistema de negocio de los medios de comunicación (la publicidad), estos han determinado que es mejor producir mucho para generar más vistas y obtener con ello los recursos necesarios. Las personas no quieren pagar por la información porque sienten que siempre ha sido gratuita; no comprenden que cuando ellos no pagan por el servicio alguien más paga por él. Por ejemplo, los gobiernos y los poderes fácticos que pagan publicidad en los diversos medios de comunicación intervienen su línea editorial y de esa manera la información que llega a la ciudadanía está filtrada bajo el prisma de muchos intereses. No es que se difundan mentiras deliberadamente, pero la información viene con un punto de vista conveniente para quien paga. Por eso para hacer buen periodismo es necesario que la audiencia pague por él. Entonces la calidad del producto podría elevarse.

P: Con los oligopolios de medios de comunicación que se han venido consolidando en el país, ¿cómo ha sido poder sustraerse a ese ambiente de posible censura?

R: Te sustraes creando tus propios espacios, el riesgo es que tu alcance se limita considerablemente. Sin embargo, hay una audiencia para todo tipo de personas, solo hay que identificar las necesidades de esas personas y tratar de servirles.

P: ¿Cuál es tu opinión sobre la confrontación que se ha dado entre algunos medios de comunicación y las autoridades o las personalidades políticas en general?

R: Esa confrontación es nociva porque busca desestabilizar la voz de las personas y coarta su derecho a la información. Busca tener a la población en la ignorancia a través de generar animadversión hacia las y los periodistas.

P: ¿Crees que existe suficiente educación mediática de la población en general?

R: No, no existe.

P: El presidente de México ha dedicado en su estrategia de comunicación secciones enteras a revisar la actuación de los periodistas, ¿cuál es tu opinión sobre el ejercicio de derecho de réplica que se ha practicado en las mañaneras?

R: No existe.

P: ¿Qué opinas del periodismo digital?

R: Es una alternativa necesaria.

P: Ante el panorama social y político, ¿cuál es el horizonte que se perfila para el ejercicio periodístico en lo que resta de esta década?

R: Existe una gran necesidad de involucrarse en la alfabetización mediática e informativa para contribuir con la formación de audiencias críticas. Esa es una de las necesidades del periodismo para las próximas décadas. No se trata sólo de llevarle información a la ciudadanía sino también de brindarle herramientas para analizarla de manera crítica. Adicionalmente, es necesario que las y los periodistas se especialicen en temas específicos para con ello poder responder a necesidades reales de las audiencias.

P: Para concluir, respecto al periodismo que se dedica a verificar información y con la importancia que tiene este tipo de medios en la actualidad, ¿qué es lo que ha ocasionado que no haya inversión suficiente para el desarrollo de plataformas como la que ofrece Verificado?

R: Lo que se necesita es que la audiencia comience a pagar por la información, así como lo hace por las películas, la música o cualquier otro producto on demand.

Los medios de comunicación que nos dedicamos a la verificación de hechos, datos y discursos no vamos a involucrarnos en modelos de negocio que traigan consigo la publicidad porque estaríamos perdiendo justamente esa independencia editorial que es vital para nuestra labor.

Hoy por hoy, el modelo de negocios tiene que cambiar para todos los medios de comunicación, pero en especial para quienes nos dedicamos a hacer fact-checking; tenemos que poder confiar en que somos lo suficientemente importantes y relevantes para la ciudadanía como para que estén en capacidad de pagar una membresía y sostener de esa manera la independencia del medio.

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Redacción